Todos tenemos un día especial, una fecha en el calendario… una cita que representa mucho más que un número en el calendario.
La Calçotada es el evento más antiguo del calendario, fue el primero de otros 18 que le han sucedido y sin acuse de desgaste.
Una jornada que además de lo entrañable y arraigada representa la esencia Sixter y que consigue unir, alrededor del automóvil deportivo a Sixters de aquí y de allá y de generaciones diferentes.
Tras muchas ediciones y habiendo vivido el pasado sábado día 15 de marzo la última de ellas podemos afirmar que su esencia y espíritu están más vivos que nunca. Casi 150 Sixters y cerca de 90 deportivos expuestos en una parrilla de ensueño llenaron nuestros ojos en un día que ni pedido por encargo.
Un sol radiante y un cielo azul reinaban desde primera hora de la mañana para anticipar una jornada a todo color. Un día en el que los abrazos, las risas y el rugir de los motores se alternaban en una sinfonía perfecta para el deleite de todos los asistentes.
Y es que ya desde bien temprano muchos eran los deportivos que iban enfilando la subida al Hotel Eurostars Sitges, lugar de donde saldría toda la comitiva después de haber podido desayunar y hacer un buen briefing de bienvenida a todos los participantes.
El espacio de salida se fue completando con un line Up de ensueño, line up que tendría en el Mercedes-AMG Black Series su máximo exponente, un súperdeportivo de ensueño derivado directamente de la competición y puesto en carretera para que unos pocos afortunados puedan disfrutarlo a sus mandos.
Completaba este line up un buen séquito de AMG, Porsche, Ferrari, Lamborghini, BMW, Bentley y Alfa-Romeo.
Sin duda, un mix de marcas, modelos, colores y configuraciones que ilustran
perfectamente el garaje ideal de cualquier petrolhead que se precie.
Cabe destacar el desembarco AMG por parte de Quadis Autolica, AMG Performance Center Autorizado y dealer oficial Mercedes-AMG quien nos brindó la oportunidad de ver , oír y sentir modelos tan especiales como AMG SL63 o el increíble AMG G580 full eléctrico con el que pudimos hacer un poquito de show en la parada intermedia de la ruta.
Tras el desayuno y obligado briefing y a pesar de lo bien que se estaba en la terraza del Hotel con el increíble sol tocaba el arranque de motores y ponernos en ruta. Para muchos quizá es uno de los momentos más emocionantes, un momento en el que cerramos el briefing y decimos algo así como “Sixters, arrancamos!!”
A partir de ahí la estampida al parking y la explosión celestial de los motores sólo es comparable a la cara de éxtasis de muchos de los fans, spotters y seguidores a los que tan agradecidos les estamos por su admiración, paciencia y respeto a lo largo de todos estos años.
Gracias por venir, seguirnos y ayudar a que 6to6 siga tan fuerte después de tantos años.
El coche Cero ocupaba ya su posición tirando y estirando el grupo en una hilera que se perdía por la recta del Golf y entraba en ruta para devorar los kilómetros de una jornada que esperábamos con ganas. Tras él una paleta de color que se fundía con el paisaje y que el coche media trataba de inmortalizar para tener el mejor recuerdo inmortalizando a los participantes.
El primer tramo nos llevaría por un mix de vías rápidas y carreteras entre campos en la zona de Mediona. Tras este primer warm up llegaríamos a Valls donde tendríamos la parada de avituallamiento y agrupamiento antes de afrontar los tramos de curvas desde l’Espluga de Francolí a Ulldemolins pasando por Poblet y Vilanova de Prades. Tramos alegres donde pudimos disfrutar sanamente de nuestros deportivos y tener un buen recuerdos estos dos puntos de paso gracias al team de foto y media que nos acompañaba.
El avituallamiento en Masía Bou fue todo un momentazo, disfrutando de un buen ambiente además de poder ver cómo se las gasta el nuevo G 580 girando 360º y abriendo sus puertas a todos los interesados.
Cabe decir que ha sido un gran protagonista en este evento.
Tras esta parada, nos esperaba los tramos más revirados. Ás de hora y media de conducción y disfrute hasta llegar a La Boella, donde disfrutaríamos de la tradicional calçotada.
Una vez en La Boella, una multitud de spotters nos esperaba para captar la mejor imagen posible de los casi 90 deportivos que nos acompañaban. Una selección AMG en el muro de la Masía recibiría a los Sixters antes de bajar a la bodega donde se degustaban los calçots con su particular salsa.
Dentro de la bodega, y distribuidos en mesas redondas se servirían los calçots siguiendo la tradición popular antes de dar paso a la segunda parte de la parrillada de carne, ya sentados y en el salón principal.
Tras esta comida y después de grandes momentos, charlas y conversaciones de sobremesa tocaría de nuevo arrancar motores para dirigirnos a La Daurada, en el Port de Vilanova i la Geltrú.
Con una bonita puesta de sol sobre el mar, y copa en mano despediríamos esta última edición de la calçotada que tan bien será recordada por los Sixters.
Gracias de nuevo a todos por vuestro apoyo, cariño y actitud. No hay palabras para describir lo que se siente poder vivir jornadas como estas casi 20 años después de que todo empezara.
Nos vemos en Madrid el próximo sábado 5 de abril.
Show must go on Sixters!
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